Los sistemas de contención son los elementos que, colocados en el borde o mediana de las carreteras, pueden ayudar a reducir la gravedad de un accidente de circulación cuando un vehículo sale de la vía abandonado la trayectoria adecuada.
Aunque existen diferentes sistemas y acabados, generalmente se distingue entre barreras metálicas, colocadas en carreteras; y pretiles, que tienen una función similar pero una estructura diferente y van instalados en los márgenes de puentes.
El tipo de sistema a emplear dependerá de las indicaciones de la dirección facultativa y varía en función de la velocidad de circulación, el volumen de tránsito de vehículos o el riesgo que el sistema pretende evitar.
Se colocan sistemas de contención en las vías con posibles caídas a distinto nivel, en taludes, desmontes o cunetas que impliquen una diferencia de altura importante respecto la plataforma, para cubrir obras de fábrica, para proteger elementos presentes en la vía como farolas o postes de pórticos y banderolas.
En determinados tramos la barrera metálica incorpora un faldón inferior que sirve de protección en caso de que el accidentado sea un motorista.